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Espirógrafo
El espirógrafo es un aparato que sirve para medir la capacidad pulmonar y la resistencia de los pulmones. Consiste en una bomba de aire que hace que el aire salga por un orificio pequeño en la parte superior de la máquina. Una manguera conecta esta abertura con una pieza de plástico flexible que se coloca en la boca y se llama «burbuja». La bomba de aire hace que la burbuja se infle y se contraiga, y el espirógrafo mide la cantidad de tiempo que tarda en inflar y contraerse. Esto nos da una idea de la resistencia de los pulmones a la entrada y salida de aire.
El espirógrafo se usa para medir la capacidad pulmonar en personas sanas y para diagnosticar enfermedades en personas que tienen problemas respiratorios. Por ejemplo, si una persona tiene una enfermedad pulmonar, el espirógrafo puede medir la cantidad de aire que puede inhalar y exhalar. También se usa para medir la capacidad de los pulmones de absorber y transportar oxígeno.
El espirógrafo es un aparato sencillo, pero muy útil. Se utiliza en hospitales y clínicas para diagnosticar enfermedades respiratorias, y también se usa en el hogar para controlar el estado de salud de las personas que tienen problemas respiratorios.
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